
Hace unas semanas volviendo del Baitu Rock pillamos el atasco grande de la carretera de Burgos. Era un domingo de julio, entrada a Madrid y última hora.
Yo pensaba que ya más tarde de las 9 no habría tanta gente... Pero no. Ya me mosqueó el cartel de prohibición a camiones de 21 a 24, justo la hora del viaje. La prohibición tiene de bueno que no habrá camiones, pero de malo que si ponen la prohibición será por algo.
Efectivamente, echaron a los camiones, cuando ya había atasco, pero no tanto cómo hubo en los últimos 100 kilómetros. Ibamos parados. "Arranca, frena y cláxon".
Se me ocurrió comentar que estaría bien un tercer carril, de cuyo nombre oficial no me acuerdo (¿carril excepcional? ¿carril adicional?). El caso es que lo que parecía un sueño, apareció de repente "Carril directo a Madrid".
No sabía si dejaría tan directo cómo para no poder coger la M40, en cuyo caso la Avenida de la Albufera hubiera servido para corregir la trayectoria, pero sí se pudo. Salímos en Sanse.
Aunque pudiera parecer una cagada por no poder superar los 80, en un atasco de esos se da cualquier cosa por poder ir a 80. Los otros carriles estaban PARADOS. Entre una y dos horas que ahorraríamos :)
Además, lo de ir tragandose las señales de prohibida tiene su gracia XD
No hay comentarios:
Publicar un comentario