"Asporto"

...y lo peor de Milán: la gente.

Nada más llegar me advirtió el pasajero que llevaba del cuidado que debía de tener al conducir. No debe uno de pensar que van a respetar las normas de circulación porque seguramente no lo harán. Lo más increible es que siquiera existen carriles pintados en la mayoría de las calles, con lo cual en dónde crees que sólo deberían de circular dos coches en paralelo de repente un tercero encuentra su hueco, metiendose cómo puede.

Al llegar llamé a un amigo que debía encontrarse conmigo, y no hubo manera de contactar. Resultó que no le funcionaba ningún teléfono y por más que pedía ayuda a decenas de personas, nadie era capaz de decirle dónde había un teléfono público que funcionara o dejarle llamar con su teléfono.

La gran estafa nos la metieron al buscar un bar: "Birra 3,50€ Asporto". Nos pareció razonable así que pedimos dos. Pero 11 euros nos clavaron. Indignados dijimos que en el cartel de la puerta la anunciaban a 3,50€, y nos repitió numerosas veces "Asporto". Resulta que significa "para llevar", así que ese precio es sólo si te la llevas y te la tomas en la calle debajo de la gran lluvia que estaba cayendo.